Hola chicas,
¿Qué tal va todo?
Me abro hoy con un gran tema: ¡la comunicación! ¿Por qué? Obvio: es súper necesario, imprescindible; la comunicación es la base de nuestra vida, de nuestras relaciones… Y os digo más: casi todo lo que hagamos, queramos y consigamos, va a estar influenciado por nuestra habilidad comunicativa.
QUE ENTENDEMOS POR COMUNICACIÓN
Vamos a situarnos. A nivel general: ¿qué entendemos por comunicación? Pues se trata del intercambio de ideas, pensamientos, sentimientos, actitudes, emociones… Lo que sea. Es dar y recibir, y todo ello podemos hacerlo mediante el uso del lenguaje hablado, escrito, corporal… En fin, disponemos de un cómputo de sistemas para transmitir: “¡Hola, mundo! Pienso, siento, conozco, quiero…” que nos permite obtener y recibir cosas, resultados u objetivos.
Ahora bien, ¿realmente le damos el valor que tiene?
Es decir, ¿tenemos en cuenta que ejercitar y preparar nuestra comunicación es crucial para gozar de unas relaciones satisfactorias: en el trabajo, con la familia, con nuestros amores…? Básicamente, en todos los ámbitos de nuestra vida. Lo pregunto, porque muchas veces no lo tomamos como algo prioritario, y sin duda, lo es.
Y no, no es nada fácil. En las relaciones humanas, la mayoría de desacuerdos y diferencias surgen por una falta de comprensión. Discusiones, malentendidos, llegando incluso a rupturas, y principalmente, porque no nos entendemos:
“No, no te he pillado; es más, quizás te he pillado justo al revés, y lo único que quiero hacer es…”
La cuestión está en que: hacerlo de forma efectiva puede suponer la diferencia entre éxito VS. problemas con los demás.
REFLEXIÓN:
Antes de entrar a exponer ciertas pistas, pregunta clave: ¿por qué muchas veces NO comunicamos, es decir, por qué parece que no nos escuchan, no nos entienden, pasan de nosotras, o no conseguimos lo que queremos? ¿Qué es lo que hace que no lleguemos a los demás? ¿Cuáles son nuestras barreras? O, a la inversa:
¿Comprendemos debidamente? O, ¿nos montamos líos mentales sin realmente pillar bien los mensajes?
Os expongo algunas posibilidades: el problema puede estar en el tono de voz que utilizamos, en la forma de movernos, de estar, de apoyarnos, de expresar… Pero también, por una falta de credibilidad o seguridad al emitir nuestros mensajes… O, ¿qué me decís de las interpretaciones que hacemos? Y no digo malas, porque no me gusta la palabra “malo”, pero ¿inadecuadas? En fin, ¡tantas cosas! ¿Valoramos?
CLAVES PARA COMUNICAR – QUÉ ES IMPORTANTE
Vamos al grano. Pistas, claves… que son esenciales para desarrollar nuestra comunicación:
LO BÁSICO
1. Ser curiosas.
Y vivir, experimentar mucho: cuanto más curiosas seamos, más cosas nos pasen, más viajemos, más leamos, en sí, cuanto
más nos nutramos de experiencias, más atractivas seremos para los demás. Asimismo, para saber comunicar, imprescindible: hablar mucho con la gente, interesarnos, preguntar… Y es que, todo el mundo nos puede aportar cosas
2. Enriquecer nuestro vocabulario
nuestros discursos pueden dotarse de una variedad exquisita de palabras… ¡Ojo! La finalidad no es “mostrarnos” o lucirnos con un súper vocabulario, sino entretener, divertir, captar más la atención del otro, y que nos entienda. Aplausos sin comprensión… No, gracias
TENIENDO EN CUENTA AL OTRO/S
3. Adaptar nuestro mensaje al otro.
Es decir, adecuar nuestra comunicación en función de: ¿a quién me dirijo? ¿A un político, a mi padre, al tío súper majo del bar, o a un compañero de trabajo…? Cada persona es diferente; así que es necesario preguntarnos por: quién es, qué siente, cómo es su personalidad, qué necesidades y qué gustos tiene, ¿qué me genera…? Se trata de desarrollar nuestra capacidad de EMPATÍA, observar, sentir, acomodarnos al otro, y comunicar en función de eso.
4. Despertar su curiosidad, sorprender.
Para ser buenas comunicadoras, importante: llegar, conectar con los demás. Y, ¿cómo? Si queremos despertar la curiosidad de ese chico tan guay (por ejemplo), lo principal es: que lo hagamos protagonista de nuestro diálogo, que se identifique con lo que contamos. Muchas veces nos centramos más en lo que a nosotras nos interesa contar, que en lo que al otro le puede resultar interesante escuchar. ¡Ojo con hablar demasiado de nuestras hazañas o de nosotras mismas! Sí que a todos nos gusta, pero a veces nos perdemos en explicar anécdotas que pasaron hace mil años, o en tender más al “sí,porque yo…”, cuando los demás esperan el “TÚ”.
TENIÉNDONOS EN CUENTA A NOSOTRAS
5. Comunicación no verbal.
Casi todo lo que expresamos, lo hacemos a través de nuestro cuerpo: postura, gestos, mirada, tono de voz… Nuestras emociones hablan, y mucho, a través de todo ello; por lo tanto súper importante conocer nuestro lenguaje no verbal. El objetivo está en que nuestra comunicación sea equilibrada: es decir, que nuestro cuerpo y nuestro discurso estén en sintonía.
¿Cómo?
Tomar conciencia. Observaros como si fuerais espectadoras de vosotras mismas. ¿Cómo me expreso?

6. Conocerse y ser coherentes.
Para que nos hagan caso, y para que nuestras ideas y nuestros mensajes convenzan, se entiendan, no podemos obviar el hecho de que: hemos de ser coherentes y precisas. Comunicar con intención, solidez y seguridad. Y para ello, hay que prepararse.
1) Por un lado, conociéndonos: encontrar lo bueno que tenemos para aprovecharlo, y conocer lo que nos hace estar inseguras, para trabajar en ello y poder jugarlo a nuestro favor
2) Por otro lado, me repito, pero… coherencia: saber qué quiero, para qué, por qué… ¿qué pretendo? Que nuestra comunicación sea creíble, justificada y coherente.
Y no, no se trata de ser unas súper mujeres, sino de tomar conciencia y ejercitarnos un poco… Ya iremos viendo más específicamente ciertas herramientas o actitudes que pueden ayudarnos a ello.
PUNTO FINAL
Como punto final, subrayo que: la comunicación es básicamente, seducción. El objetivo es seducir a quien nos escucha; es decir, trascender, generar algo, enganchar. Se trata de conectarnos a las emociones del otro, de sentir y de hacerlo sentir. Chicas, juguemos a nuestro favor, sintamos, y emocionemos. Y que nuestros actos nos lleven a los resultados deseados; sin duda, lo que queremos es disfrutar de nuestras relaciones,
¿no?
En próximos artículos, trataremos aspectos más concretos y específicos de la comunicación: Asertividad, empatía, persuasión…
Un abrazo,
Laura