Bueno amigos, creo que en este artículo poco hay que añadir ya que Selu lo ha explicado todo de forma tan magistral que casi me deja sin palabras. No obstante, algo de marco teórico nunca viene mal, así que veamos cómo se fundamenta en este caso el tema que nos ocupa cuyo eje central es LA INFIDELIDAD.
EL DATO
80 % de los infieles tuvieron aventuras con un “amigo”, generalmente un compañero de trabajo. 50% de mujeres y el 62% de hombres infieles tuvieron un affaire con alguien de la oficina.
Existen varios motivos por los que una mujer o un hombre pueden llegar a ser infieles a su pareja. Cuando conjugan varios de ellos, o incluso uno solo se da de manera muy intensa, hay muchas posibilidades de que se produzca una infidelidad. A su vez, esa infidelidad se verá reforzada y por tanto mantenida por una serie de estímulos (emocionales, sexuales, personales) y circunstancias (la atracción de lo prohibido, autorrealización…) que a su vez generan una serie de respuestas fisiológicas (hormonales). Estas respuestas fisiológicas actuarán como lo hacen en los mecanismos de cualquier otra adicción, haciendo que en casos extremos se pueda incluso producir una dependencia emocional (enganche) con el amante en concreto o con amantes en general. A niveles casi patológicos, muchos hombres y algunas mujeres (los picaflor) adoptan la infidelidad como una especie de way of life. Hablamos de LA ADICCIÓN A SER INFIEL.
Pero comencemos por el principio:
Existen, en mi opinión varios tipos de infidelidad según la forma de su inicio (posteriormente pueden derivar en otras formas de infidelidad)
TIPOS DE INFIDELIDAD
A) La meramente sexual:
Es animal e impulsiva. Representa la pasión, la lujuria y la excitación. Una persona que está metida en una relación se ve irresistiblemente tan atraída por otra que pierde totalmente el juicio en pro del placer de los placeres.
Otra variante es la de aquellas personas a las que su pareja no les llena o no son compatibles en el plano sexual. Es la querida y deseada INFIDELIDAD ATRACCIÓN FATAL (cuidado con ella).
Normalmente son relaciones fugaces, tremendamente furtivas con uno o varios amantes, pero desemboca por una de las dos partes en algo personal si los encuentros se repiten con el mismo.
B) La personal:
Es más racional. Se debe a circunstancias personales. Personas que no tienen sus necesidades personales y/o de pareja cubiertas. En la mayoría de mujeres la baja autoestima hace que recurrentemente necesiten sentirse deseadas. Es la INFIDELIDAD POR VANIDAD.
Sí amigos, la sed de vanidad de muchas mujeres nunca tiene fin, y por más que se hayan sentido deseadas por miles de hombres siempre necesitarán más. En cambio en los hombres, la infidelidad puede llegar a constituir una forma de hombría (¡¡arcaico pero cierto!!)
Otra forma de infidelidad personal es la de aquell@s a l@s que su pareja no les llena en el plano personal o incluso les trata mal o anula su personalidad. Si en este caso conocen a alguien que les hace descubrir y enfatizar lo mejor de ellas mismas, las personas evolucionan y reaccionan de manera completamente inesperada. Este proceso puede llegar a ser tremendamente emocionante dando lugar a la tercera.
C) La emocional.
Esta última es la única que está documentada. Es la que yo denominó “INFIDELIDAD LOS PUENTES DE MADISON”. Es la peor y más adictiva, pudiendo llegar a ser incluso enfermiza. Se da cuando a una persona su pareja no le llena emocionalmente, hay un déficit, un conflicto o una carencia no resuelta en la pareja.
Suelen ser parejas que han caído en la rutina, el aburrimiento, la monotonía, etc… y uno de los dos o ambos necesitan experimentar “emociones fuertes” para volver a sentirse vivo/a y recuperar la ilusión. Si no has sabido conquistar día a día a tu pareja, probablemente sufrirá este tipo de infidelidad y la perderás. Normalmente no suele ser esporádica y el amante (“el otro”) es fijo y protagonista de una vida paralela, pudiendo ser incluso más estimado que la pareja oficial.
Tengo que matizar que estos tipos de personalidad no son exclusivos ni excluyentes entre sí, sino que la infidelidad puede pasar de un tipo a otro y/o tener componentes de los tres, comenzando como aventura sexual y terminando como doble vida.
Dicho esto, si vuestro objetivo es conquistar a una persona que tiene pareja con la que tenéis una relación, y dejar así de ser “el/la otro/a”, lo ideal es identificar el tipo de infidelidad que está cometiendo. Si es sexual y no se basa en nada más, cuando se satisfaga la necesidad sexual si no se produce el enganche desaparecerá sin más, generando tras de sí un gran complejo de culpa, ya que la infidelidad amigos no es lealtad, normalmente no está bien vista, en muchos casos se considera inmoral y desde luego no es respeto hacia la persona que elegiste como pareja (a menos que a su inicio la pareja pacte un tipo de relación abierta, en cuyo caso no existen infidelidades).
Esto es exactamente lo que le ocurre a la amiga de nuestro ejemplo a la que podemos presuponer muy atormentadas. En lo personal ha decidido casarse con su pareja, pero se siente tremendamente atraída por Selu, que además le hace sentirse deseada reforzando su autoestima, y con el que mantiene una relación de infiel/amante esporádico, con un claro enganche (inventa excusas para quedar con él) y un componente emocional clarísimo (ella está sufriendo, por lo que le invita a la boda, para comprobar si de este modo el también sufre de alguna manera, por lo que el sentimiento sería recíproco. Lo cual le provoca tremenda satisfacción al ver que a Selu le afecta porque reafirma el componente emocional también por su parte).
Todo esto la hace sentirse bien, y por eso se repiten los encuentros. No obstante se produce un conflicto sexualidad/emoción-decisión personal que es el que genera el complejo de culpa. Para acallarlo ella se hace la difícil y la dura y una vez tranquilizada su mala conciencia sucumbe a un último encuentro que ella misma ha provocado para elaborar el duelo por la inminente pérdida (antes de que Selu hubiera manifestado que quería acabar con los encuentros debido a un componente emocional problemático y difícil de gestionar, ella ya había decidido finalizar el ciclo para empezar una nueva vida de casada moralmente aceptable, después de poner en una balanza los sentimientos, proyectos comunes, la historia vivida y replantearse lo que se desea y con quién, con el consecuente desgaste emocional y psíquico y la intención de reformular y afianzar su relación de pareja).
En este caso la forma elegida para la despedida es la clásica DESPEDIDA DE SOLTERO/A. Es un mecanismo que varios de vosotros habréis utilizado con vuestros ex. Sabéis que la relación ha llegado a su fin, habéis roto y necesitáis “despediros”. Al igual que nos despedimos de nuestros difuntos con una última celebración de su entierro, velatorio, etc… les decimos adiós para cerrar el ciclo y poder continuar con normalidad con nuestras vidas, al finalizar una relación de pareja (lo cual constituye igualmente una pérdida), o al comenzarla ya como casado se suele zanjar el ciclo anterior con un último encuentro (vulgarmente “polvo de despedida”) en el que ambas partes se desquitan de todas las futuras “espinas” que puedan surgir y entierran sus fantasmas para siempre. Es el catalizador del cambio. Por eso a partir de entonces la relación CAMBIA de amantes a amigos.
Está por ver cómo terminará esta historia y si nuestra amiga podrá cumplir la decisión que ha tomado, ya que es evidente que la atracción sigue ahí. Ella ya está envenenada por sus propias hormonas gracias a las estrategias certeras de Selu, y ese veneno amigos, solo tiene un antídoto.
AUTOTEST DE INFIDELIDAD
De postre, he aquí un TEST autoadministrado, pachanguero y totalmente de andar por casa, para poder identificar si estás a punto de convertirte en el amante de alguien que tiene pareja. Y si aun así sigues teniendo dudas Don´t worrry!! Pronto empezaremos con los talleres y la consulta online.
• ¿Él/ella no quiere contarle a su pareja todo sobre vuestra amistad?
• En vez de compartir sus sentimientos con su pareja, ¿te los cuenta a ti?
• ¿Comenta los problemas que tiene en su pareja contigo?
• ¿Existe una evidente atracción sexual entre vosotros?
• ¿Hace espacio y planea momentos para charlar y estar contigo?
• ¿Hay mensajes subidos de tono?
• ¿No quiere que os vean juntos?
• ¿Él/ella pierde el interés por sus relaciones sexuales con su pareja o cuanto las tiene piensa en ti?
• ¿Hay elementos de coqueteo o proximidad emocional que esperáis, necesitáis y extrañáis?
• ¿Cuándo su pareja le/la llama mientras está contigo se siente incómodo/a?
* SOS: Si respondes sí a dos o más de estas preguntas, ya has desarrollado lazos que ponen en serio peligro su matrimonio o pareja o el tuyo!!
ANA
