Erotismo masculino para chuparse los D2 (II)

Después del marco teórico para facilitar la comprensión, os dejo algunas sugerencias para expresar vuestro erotismo masculino en las relaciones sexuales.

El marco de juego

Nuestra misión es hacer de cada minuto un momento de erotismo. Debemos ser imaginativos y dotar cada segundo de una alta carga de sensualidad para hacer florecer sus sensaciones eróticas, a la vez que la enseñamos a identificarnos con una sensualidad masculina extrema. 😉

El erotismo romántico, como roza las dinámicas del enamoramiento (juega con fuego), se basa en la cercanía y la sinceridad emocional. Un erotismo que cuida de los detalles, que los disfruta, que los disecciona y que escruta su cuerpo como si en su piel se encontrase el misterio de la creación. Misterio que, al descubrir, hace que la abraces, la estreches, la penetres de forma salvaje y la acabes tirando de la cama por pasarte de borrico.

Siempre has oído que las mujeres prefieren un sexo romántico, frente al puramente «físico» del deseo masculino y, como todo, yo opino que es relativo. El rapidito, el salvaje, el tierno, el duro y el taladrador industrial tienen su lugar, su momento y sus circunstancias, pero también los cariñosos preliminares, los roces que excitan hasta la incontinencia y la conversación íntima deben formar parte del ritual y de tu despliegue erótico masculino ¿ok?

Pues bien, ya que tenemos nuestro periscopio ajustado y funcionando, veamos como hacer que encuentre la profundidad adecuada:

• Mandanguea: Hacer el amor con humor. El sentido del humor no sólo nos hace más sexys y atractivos, sino que también nos crea el marco de expresión natural para comunicar nuestras emociones más masculinas.

• Haz la relación sexual estimulante desde el principio: El sexo se basa en el deseo y tu objetivo es sintonizar con sus fantasías y deseos para adaptar tus procesos de tu comunicación sexual.Para darle un anticipo de tu sensualidad masculina, déjala excitada, juguetea sin penetrarla… …busca que su deseo tome las riendas y te grite alguna dulce “guarrada de chicas” 🙂 🙂 🙂

• Impulsa sus emociones: mírala más a los ojos, mírala durante más tiempo, mírala diciéndole con el pensamiento como te hace sentir, que estás disfrutando aplazando tu orgasmo por ella, que admiras su belleza y te fascina estar follándotela, que si sigues recibiendo tanto placer por su parte, te vas a enamorar. Lo que sientas, comunícalo, es altamente terapéutico.

• Impulsa sus sensaciones físicas: toca su codo, el interior de sus muslos, sus pechos con tu pene, arropa sus pies, masajea su cuerpo y sus genitales, traza círculos en su piel, escribe palabras en su espalda para que las adivine.

• Juega, juega, juega y cede el turno: El sexo ligero, divertido, juguetón y no hace sufrir.

• Descárgate un Kamasutra, mejor ilustrado: estudia las variantes amorosas y sus técnicas sexuales más placenteras.

• Léela relatos eróticos o mejor, invéntate uno con ella. Debes dejar que tu imaginación gobierne tu liderazgo en la interacción sexual.

• Por supuesto, que ella se invente un relato erótico para ti. No se te olvide ponerle difícil la terea mientras la muerdes, la dibujas cositas con arañados, rozarla con tus labios, etc.

• Ten conversaciones eróticas con ella. Todo en la vida puede tener su punto de vista erótico-lúdico. Sigue tu instinto masculino para equilibrar hasta dónde puedes llevaros.

• Dile frases excitantes (guarreridas): todo tiene un lugar, un momento, un tono, un lenguaje no verbal para acompañar. Expresa tus impulsos masculinos sin caer en la vulgaridad.

• Y sobre todo, mucha sinceridad emocional por tu parte. Y dentro de estas emociones sinceras incluyo la de sentir que, con tu expresión erótica, recibes lo que deseas. Si tu eres tu expresión sexual real, no esperes menos de ella.

El deseo de fusión erótica, el deseo, la lujuria, la ternura y la protección de las mujeres, son parte de tu un legado masculino que, por derecho, siempre te ha correspondido. Descúbrete descubriéndolo.