El enfoque lúdico festivo de la seducción


Desde pequeñito he sufrido rechazos.
Algunos muy espectaculares, incluso para haberlos grabado y hacer de ellos contenido para la paramount comedy. Pero cierto es que cuando yo llegué a este mundo me dijeron que era un natural por algo. Nunca me he podido quejar de mi relación con las mujeres ni de la cualidad de relación con ellas.

Durante mis 34 años he desarrollado una forma de interrelacionarme definida y admirada. Mi forma de vivir la seducción de toda la vida. Muy parecida a mi forma de relacionarme con los demás.
Es la fiesta y el enfoque ya no solo positivo sino divertido de cada momento. Mi filosofía de vida.

Ser una persona abierta, consciente de sus limitaciones y con la pasión de descubrir cosas y sentir: La voracidad emocional.

Hemos querido plantear la seducción desde esta casa como una disciplina coherente con lo que somos y hemos sido durante nuestra vida, algo que se puede aprender de una forma divertida, sencilla y natural basada en nuestra propia experiencia de la naturalidad.

Hablábamos de «la mandanga» como esa visión, ubicación de emociones y causalidad de nuestra conducta y quisiera, como he comentado en el podcast de julio, darle forma al asunto.

En la universidad me enseñaron a estudiar la conducta como algo con taxonomía propia:

A la hora de plantearnos una acción, debemos de saber que toda acción tiene una motivación interna y externa. Nosotros nos movemos hacia dos tipos de .recompensas: internas y externas.

MOTIVACIONES INTERNAS

La fiesta nos la debemos montar nosotros. El incentivo o premio de nuestra conducta está en nosotros mismos y nosotros nos premiamos por la diversión de nuestra decisión. Nos autopremiamos «mandangueando».

Por otra parte todos tenemos unas necesidades psicológicas que no podemos obviar.

1º La autonomía: De nosotros depende el planteamiento y como yo interprete lo que me sucede y se me avecina esta noche, esta cita o estas vacaciones. Con lo cual, no dependemos de nadie para sentirnos mandangueando. La visión de lo divertido es subjetivo y nosotros no necesitamos gasolina externa para seguir manteniendo nuestra conducta. Somos incombustibles.

2º El autodeterminismo.
Los que practicamos la vía más directa y natural no dependemos de que los demás nos hagan divertido lo que se acontece. Nosotros orientamos nuestra interpretación de los acontecimiento hacia la fiesta, el sexo, y el descubrimiento mútuo como la forma más natural de interrelacionarse entre un hombre y una mujer. Con lo cual nuestro destino es nuestro, tanto la diversión como la interpretación de lo que pase entre ella y yo.

3º Locus de causalidad interno_
Nosotros somos la cáusa de nuestra actitud divertida. El motor e inicio de nuestra fiesta y la fiesta que ofrecemos a los demás. De forma que no necesitamos la intervención de nadie como cáusa de nuestra diversión. Aunque, como veremos más adelante, sí necesitamos estímulos (chicas) para nuestra actitud seductora ludica festiva.

4º La recompensa que obtenemos, nuestra sensación, nuestra risa y activación la sintamos como una informadora de que la conducta que hemos iniciado cumple nuestras expectativas. O sea, que nos veamos riendo, que nos notemos excitados por lo que está pasado, contentos, entusiasmados, etc van a suponer señales de de información de que todo marcha como pensábamos.


MOTIVACIÓN EXTERNA:

Que nuestra conducta tenga incentivos externos, si estamos hablando de una interacción con alguien es inevitable.Conseguir sus señales de interés conforme actuamos, utilizar el espectador de la película subtitulada y darnos cuenta de que ella sigue con nosotros tras un buen rato de una forma positiva, aplicar la Dramaturgia Egolandiana de Santi y ver que todos estamos bien acoplados en nuestros papales, van a ser pequeñas recomenpensas a nuestra conducta. Van reforzar que el planteamiento de ligar de forma divertida sea más sólido.

Que tengamos una expectativa real de conseguir nuestras recompensas, es decir, que cuando iniciamos una conducta seductora «mandanguil» lo hacemos porque creemos que podemos conseguir nuestros objetivos. Creemos que podemos ligar y pasárnoslo bien ligando. Por eso lo hacemos. Por eso la gente que viene a mis talleres o los de Helio, al verse a sí mismos consiguiendo resultados con un planteamiento divertido lo repite. LO CREE AL COMPROBAR QUE SON CAPACES DE HACERLO Y POR TANTO REPITEN LA ACTITUD.

Tras 34 años puedo decir que mi conducta ha sido «mandanguera» utilizando el directo examinador, porque mi motivación interno y externa han tenido recompensas internas y externas, han reforzado mis pautas de comportamiento y durante estos años me he formado en la unversidad para dar solución a solventar con éxito vuestro aprendizaje. Aquí somos expertos en modelar vuestras conductas y las dimensiones de la personalidad, de las que hablaré más adelante para, con la máxima experiencia enseñaros la seducción de una forma sencilla, directa, profesional y sobre divertida.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *