Mejorando nuestro estado de ánimo

Nuestro estado de ánimo equivale a nuestra manera de andar por el mundo.

Viene a ser cómo nos sentimos y cómo nos movemos en consecuencia. Cuando estamos bien, parece que atraigamos más fácilmente a los demás, la vida nos sonríe y estamos más creativos, más ligeros y las buenas noticias se suceden. Cuando no estamos tan bien,  parece que pase todo lo contrario. ¡O al menos así nos lo parece!

Este es fluctuante, cambia y debemos aceptar esto como normal. Sin embargo podemos hacer diferentes cosas para estabilizar nuestro estado de ánimo en nuestra vida normal. Para casos de depresión habría que iniciar un proceso terapéutico en consulta sin duda alguna; antes de llegar a este punto podemos hacer muchas cosas para estar mejor, más centrados y más felices.

El objetivo final será haber desarrollado el proceso mediante el cual hacemos todo lo que esté en nuestra mano por nosotros mismos, a modo de principio de mejora constante. Mientras, podemos dotarnos de las herramientas psicológicas para ello. Por ejemplo, darnos cuenta de en qué situaciones tendemos a estar mejor y en cuáles peor. O que cosas concretas podemos hacer en nuestra vida cotidiana para elevarlo. Para ello de momento te remito a la sección Psicoteca de mi web donde encontrarás diferentes documentos para descargarte e ir trabajando, algunos de ellos también irás encontrándolos en esta web.

Todos realizamos actividades, conocemos personas o visitamos lugares que son capaces habitualmente de hacernos sentir bien. Como pequeñas grandes píldoras que nos animan. Tener en mente las mismas siempre es interesante (incluso en un pequeño listado por escrito). Sin embargo, éstas son ajenas a nosotros y en ocasiones no nos estarán disponibles. No siempre podremos visitar esa montaña lejana donde tan a gusto nos sentimos, o gozar con hacer nuestro deporte favorito con ese amigo de la infancia que hace tiempo que no vemos.

Desde la Psicología Positiva se nos proponen una serie de ejercicios para realizar en nuestro día a día con el fin de mejorar nuestro estado de ánimo positivo. Estos – y aquí viene una buena noticia – no se basan en el pensamiento mágico si no en estudios científicos. Así, este conocimiento obtenido mediante la investigación se incorpora a la psicología cotidiana. ¿Qué te sugieren herramientas llamadas “La visita de gratitud” o “Es mi día del humor, ¡lo siento!” Estas eficaces y positivas herramientas nos permiten de manera sencilla disfrutar de un optimismo realista..

La cuestión clave es aplicarlas con constancia en el día a día, con lo que nuestro estado de ánimo se mantendrá en plena forma. En próximos artículos hablaré de cómo mantener la motivación para llevar a cabo los cambios que necesitamos y llegar a la mejor versión de nosotros mismos.