Libertad: Transformarnos desde los hábitos (IV) Ejemplos y resumen

Este es el último de los 4 artículos sobre la transformación desde nuestros hábitos. Con ejemplos y resumen, aquí tienes la serie completa.

 

       

Crear un nuevo hábito

Ahora veamos como crear un nuevo hábito, primero vamos a decidir qué hábito queremos adoptar, ya que, depende del nivel de exigencia de este mismo, nos resultará más fácil o menos fácil habituarnos. Imaginemos que queremos adoptar el hábito de tomarnos dos vasos de agua antes de irnos a dormir, en ese caso es muy fácil, nos marcamos un detonante y una recompensa, luego introducimos la rutina necesaria:

HÁBITO – ESTRUCTURA CORRECTA

Detonante: Tener sueño y ganas de irse a dormir.
Rutina: Beberse dos vasos de agua.
Recompensa: Irse a dormir.

Como veréis, la exigencia de este hábito es baja, por lo tanto adaptarnos a algo así sería relativamente sencillo, ahora imaginemos que queremos adoptar el hábito de hacer dos mil millones de abdominales a la mañana, un hábito que nos exige un poquito más que el anterior, por tanto será más complicado, veamos como quedaría si lo hiciéramos como el anterior ejemplo.

HÁBITO – ESTRUCTURA INCORRECTA

Detonante: Despertarse y lavarse los dientes.
Rutina: Hacer dos mil millones de abdominales.
Recompensa: Desayunar.

Un poco absurdo, ¿no? Pues bien, con los hábitos que requieran un nivel de exigencia mayor vamos a tener que dividirlos a lo largo de los días, de manera que los hagamos de manera progresiva, por ejemplo, la rutina del día uno sería hacer 50 abdominales, 75 el dia dos, 100 el día tres (por poner algun numero, no soy ningún experto en abdominales).
De esa manera, llegaríamos al hábito que nos habíamos propuesto yo habituados a hacer un gran número de abdominales.

Este punto es muy importante chicos, por eso hay tanta gente que se propone dejar completamente de fumar un dia para otro y terminan recayendo en el hábito, porque el nivel de exigencia de dejarlo así de repente es muy grande. Sería mucho más fácil si nos planteasemos una rutina progresiva y diaria donde cada día fumemos menos, hasta que no fumemos más.

La recompensa también aumenta en las actividades de mayor exigencia, si un dia fumamos menos la recompensa no debería ser simplemente la satisfacción de haberlo hecho, si no algo que nos atraiga más (una buena comida, un masaje, relajarnos en casa, lo que sea) de manera que cuando se dispare el detonante ya estaremos disfrutando de la futura recompensa y la rutina ni la notaremos.
Es recomendable que la recompensa vaya variando para no salir de un hábito y caer en otro. (dejar de fumar pero empezar a comer mucho).

La cantidad de días necesarios para habituarnos completamente variará en relación al nivel de exigencia del hábito, aunque el doctor Maxwell Maltz  afirma que en 21 días se puede interiorizar el 80% de un hábito sin problemas, asi que ya sabeis chicos…
¡21 días para ser más molones!

Resumen General de la serie de los hábitos

A) Las cadenas son todas las influencias que obtenemos por parte de distintas fuentes de educación, son la educación directa, la educación indirecta y el entorno.

B) El camino que recorre nuestro aprendizaje desde las cadenas hasta nuestra conducta y hábitos nos condiciona y limita.

C) El camino inverso, desde los hábitos hasta la actitud, nos permite crearnos nuestras propias limitaciones.

D) Para cambiar nuestra actitud, tenemos que cambiar los hábitos nocivos o crear otros nuevos, para eso necesitamos saber el detonante, la rutina y la recompensa.

E) Para transformar un hábito, reemplazamos la recompensa y la rutina, para crear un hábito primero miramos cuánto nos exige, si es poco hacemos el ciclo sin más, si nos exige mucho lo dividimos a lo largo de los días, aumentado la exigencia de la rutina cada día hasta llegar al hábito propuesto.

F) Nos exija mucho o poco, lo creemos o lo transformemos el hábito tiene que hacerse cada día hasta un mínimo de 21 días para empezar a asimilarlo.

Chicos y chicas, perdonadme si me ha quedado algo complicado, pero os voy a pedir un favor, no os toméis esta serie de artículos como unos más de los de Yago, esta es una herramienta que nos permitirá cambiar una cantidad de cosas inimaginables en nuestra vida, tenedla en cuenta.
Y si teneis dudas al respecto ponedla en los comentarios o agregadme a mi cuenta de facebook “Yago Egolandseduccion” y podré responderos por ahí.

¡Un abrazo colectivo!

El avance sexual (I): Primeros conceptos

El avance sexual es la progresión a nivel emocional, física, e incluso contextual (el contexto en este caso es el lugar donde nos encontremos) que nos va a permitir avanzar, e incluso retroceder en una interacción desde que conocemos a una persona o personas desconocidas o partiendo de un circulo social como amigos, vecinos, compañeros de trabajo, etc. hasta obtener sexo con ella/as.

EL INSTINTO

Otro factor importante a tener en cuenta es el instinto, más en concreto el reflejo (respuesta involuntaria producida por un estimulo, en este caso una mujer que nos gusta), deseo que proyectamos hacia la otra/as personas.

Lo que quiero mencionar en este último párrafo es que a nivel interno tenemos que tener el deseo de querer sexo con esa/esas personas.

¿Qué ocurre cuando avanzamos a nivel emocional y físico y esa persona no nos pone o excita?

Ocurre que se ve muy incongruente, la cara es el espejo del alma y amigos esto nos delata, no se te ve con intenciones y pareces alguien actuando, se ve forzado y eso no es nada natural.

PREJUICIOS

Otro punto importante a tener en cuenta es que muchos piensan que la mujer es de una determinada manera y la juzgan por la forma en que se comportan con nosotros. Ellas perciben matices emocionales en los demás, son mucho más adaptables y cambiantes que el hombre, en concreto ellas se adaptan a lo que ocurre a su alrededor.
Su actitud muchas veces va a depender de lo que reciba de nosotros.

EJEMPLO DE ACTITUD Y AVANCE SEXUAL

Pongamos un ejemplo de este último párrafo:

Supongamos que Laura conoce a dos chicos uno de ellos Carlos y el otro Max.

Carlos queda un día con Laura y se comporta con ella como un niño bueno, se van a cenar, después al cine, se cogen de la mano y se dan 4 besitos. Durante la velada Carlos se pensaba que Laura era una nena buena y no se acostaría con el el primer día. Por lo cual al finalizar la velada cada uno se va a su casa y hay no ha pasado nada.

Días después Max llama a Laura y se le ve que desprende mandanga por los 4 costados, el tío esta alegre y juguetón y deciden quedar para tomarse algo. Durante la cita Max por su experiencia sabe que por supuesto a las mujeres también les gusta el sexo y ni corto ni perezoso se pone a hablar de temas sexuales, se empiezan a besar y terminan en casa teniendo una bonita noche de sexo.

¿Qué ha ocurrido en esta situación?

Laura es la misma persona, sin embargo estos chicos se comportan de manera diferente.
Si Carlos se hubiese comportado de la misma manera que Max, este hubiese tenido una velada similar a el.

Este ejemplo es solo para orientaro sobre como influye la manera de comportarnos en ellas, en el siguiente artículo vamos a profundizar en cómo avanzar sexualmente.

Un saludo, MAX

La vida postpareja (IV): Recuperación

En los artículos anteriores os hablé de las diferentes fases por las que se pasa tras una ruptura. Me gustaría hacer un resumen de las mismas para poneros en situación y que entendáis lo que os voy a explicar a continuación.

[button color=»red» link=»https://www.egolandseduccion.com/la-vida-postpareja-i-topicos-y-fases-de-la-ruptura/» size=»medium» target=»_blank» font=»georgia» textcolor=»#FFFFFF» bgcolor=»#500752″ align=»center»]Fases y tópicos que no ayudan[/button] [button color=»red» link=»https://www.egolandseduccion.com/la-vida-postpareja-ii-negacion-y-culpabilidad/» size=»medium» target=»_blank» font=»georgia» textcolor=»#FFFFFF» bgcolor=»#500752″ align=»center»]Fase de Negación y Culpabilidad[/button] [button color=»red» link=»https://www.egolandseduccion.com/la-vida-postpareja-iii-resignacion/» size=»medium» target=»_blank» font=»georgia» textcolor=»#FFFFFF» bgcolor=»#500752″ align=»center»]Fase de Resignación[/button]

Resumen de fases de la ruptura

Todas las fases previas a la recuperación tiene una característica común: se refieren a momentos de dolor, momentos de duelo, momentos de sufrimiento. Es decir, que hasta ahora os hablé de todo el aspecto “matador” de una ruptura. En la negación evitamos la realidad, en la culpabilidad nos sentimos destrozamos psicológicamente y en la resignación aceptamos la realidad pero el negativismo aún nos puede.

FASE DE RECUPERACIÓN

Bien, pues para explicaros la recuperación usaré una metáfora que para la ocasión creo que resultará muy adecuada:

Supongamos que en lugar de una ruptura, habláramos de caer dentro de un pozo. Íbamos paseando tan tranquilos por un parque y cuando menos lo esperábamos caímos a un pozo.

En ese momento, al vernos dentro tirados en el suelo pensaríamos que eso no puede ser cierto. Es un shock. A continuación, pensaríamos en todo lo que podríamos haber hecho para no caer ahí y en todo lo que nos llevó a caer. No obstante, llegará un punto en el que aceptemos la realidad y nos demos cuenta de que estamos allí y que nada de lo que hayamos hecho antes puede cambiarlo. Sin embargo, y como si esto fuese una película de MacGuyver, siempre hay una escapatoria con la que no contábamos. Una cuerda colgando desde la parte de arriba del pozo. Una cuerda que hasta ahora habíamos obviado y que de repente parece ser nuestra escapatoria. Podemos seguir sentados para siempre en el pozo o podemos agarrar la cuerda y empezar a escalar un poco cada día. Y esto es precisamente la recuperación. Agarrar esa cuerda y empezar a escalar. Bien es cierto que con ayuda de nuestros amigos, familiares, etc. la escalada por esa cuerda será más fácil, ya que ayudan a tirar de la cuerda hacia arriba. El problema es que ellos no pueden estar continuamente ayudándonos, y por tanto debemos ser nosotros mismos los que nos esforcemos para escalar.

Como en todo avance, o como en todo momento difícil en la vida, siempre existen obstáculos y dificultades que nos harán más difícil el camino. No obstante, la creencia de que la vida son dos pasos hacia adelante y uno hacia atrás nos puede ayudar a gestionar la caída. Siempre que tengamos claro que 2-1 es 1, podremos seguir adelante. Cada día son dos pasos adelante y uno hacia atrás, pero en global eso es un paso hacia adelante. Así se gestiona la recuperación. Los pensamientos sobre una vida mejor o los pensamientos sobre un nuevo futuro, nos motivan a levantarnos y a estar un poco mejor cada día.

Con esto quiero decir que la recuperación es la fase más larga de todo el proceso de ruptura. Principalmente, porque no se puede rehacer la vida en una semana, ni en un mes, y no se puede sustituir a alguien en dos minutos.  Sin embargo, desde el momento en que entendemos que ese día llegará, cogemos la cuerda y empezamos a escalar.

De todas maneras, esto no significa que nos hayamos olvidado de la persona que motivó nuestro dolor, sino que cada día le vamos dedicando un hueco más pequeño en nuestra cabeza. A medida que escalamos por la cuerda, la visión del lugar en el que caímos se ve cada vez más pequeño y la luz que nos guía a empezar nuestra nueva vida se ve con un poco más de claridad.

Muy bien. Pues llegado este punto, estoy seguro de que te estarás preguntando: ¿cómo hago para ser positivo y escalar por esa cuerda?

Te planteo una serie de ejercicios para avanzar un poco más cada día:

Ejercicio 1

Al igual que te dije en el artículo anterior, piensa en todas esas cosas que te hubiera gustado cambiar de él o de ella. Al mismo tiempo, piensa en todas las cosas que si que te gustaban. Ahora úsalas para que guíen tu nueva búsqueda. Úsalas como el primer objetivo de tu nueva vida. Es sencillo, se trata de volverse más exigente y darse cuenta de que por mucho que tardemos, si tenemos claro lo que queremos, lo conseguiremos. Es decir, define tu persona ideal y ponte manos a la obra.

Ejercicio 2

Establece una serie de objetivos vitales. Puedes hacerte las siguientes preguntas: ¿dónde quiero vivir?, ¿con quién quiero vivir?, ¿en qué quiero trabajar?, ¿qué le falta a mi vida?, etc. Se trata de que definas con claridad cada uno de los objetivos que te interesen y que ellos sean las razones que te levanten cada día de la cama.

Ejercicio 3

Disfruta, disfruta, disfruta!!!! Diviértete con todo lo que hagas a partir de este momento. Parece mentira, pero el dolor nos regala una sensación de vida que es inigualable. Que no se diga en el futuro que te quedo algo por hacer. Como dice Egoland, “la diversión es el elemento vivificador, el fluido que lubrica la vida…..y el sexo”.

Si hacemos esto, estoy seguro de que la escalada por la cuerda será cada día un poco más sencilla. Y cuando miréis atrás que sea para ver todo el camino que lleváis recorrido y no para pensar en que es mejor dejarse caer.

Sin más, me despido con una frase que resume a la perfección toda esta serie de artículos. Ahora a recuperarse y a ser felices. Es difícil, pero estoy seguro de que lo conseguiréis. Yo confío en vosotros. Let´s Go!!!

“LA VALENTÍA MÁS GRANDE DEL SER HUMANO ES MANTENERSE EN PIE AÚN CUANDO SE ESTÉ CAYENDO POR DENTRO”

 JORGE

Libertad: Transformarnos desde los hábitos (III)

Repasamos: Las cadenas (Ed. Directa, Ed. Indirecta y Entorno) influyen de una manera tremenda en nuestra actitud, llegando a estar esta muy condicionada por estos tres aspectos. (lee los anteriores artículos aquí)

           

Los Hábitos

Como he dicho antes, los hábitos son una serie de actos que, en base a la repetición, los adquirimos como parte de nuestras conductas. Son la clave para conseguir la transformación de las cadenas y la libertad, siempre que sepamos cómo trabajar sobre ellos.

Si bien hábitos puede haber muchos distintos todos tienen una estructura común, es la siguiente:

Detonante: El estímulo que produce el inicio del hábito, puede ser una acción, una emoción, una palabra, un sonido, etc. En los hábitos automáticos el detonante suele ser un estímulo del cual no somos conscientes. Sin embargo, para crear nuestro propio hábito podemos introducir el detonante que deseemos.

Rutina: La acción de hábito, es decir, lo que hacemos o dejamos de hacer cuando este se produce. Este es, obviamente, el paso más difícil de cambiar o de adoptar a la hora de crear un nuevo hábito.

Recompensa: El premio que recibimos para completar la rueda del hábito, puede ser una sensación, como sentirnos satisfechos de salir a correr, una acción, como irnos a dormir, puede ser consumir algo, como una buena comida, etc.

Vamos a verlo, ejemplificado:

– Situación: Estamos en casa jugando al WoW, cuando nos damos cuenta de que llevamos todo el mes igual, decidimos pegar un cambio y salir a hablar con mujeres a la plaza más cercana, pero cuando llegamos y vemos a una mujer despampanante, no se nos ocurre otra cosa que ponernos nerviosos y no hacer nada.

Detonante: Pensar en ir a hablar con una mujer atractiva. Nervios.
Rutina: Escapar de esos nervios y ansiedad no acercándonos a la mujer.
Recompensa: Salir del estado de nerviosismo.

Muchísima gente (yo me incluyo) ha repetido esta estructura en algún momento a lo largo de su vida. Si bien es necesaria, para no sentirnos ansiosos todo el dia, no nos va a ayudar a cumplir nuestro objetivo, que es hablar con la mujer despampanante. Y cuanto más repitamos esta estructura (ponernos nerviosos y no acercarnos), más reforzaremos el hábito, y más difícil se nos hará acercarnos a la próxima chica. (eso no implica que sea imposible)

Así que, para cumplir nuestro objetivo vamos a tener que transformar ese hábito o crear uno nuevo.

Transformar o crear un nuevo hábito.

Como hemos visto, transformar o crear hábitos es el primer paso para cambiar nuestra actitud, pero en la escuela no nos enseñaron a hacerlo, así que ¿como nos lo montamos?
Veamos.

Para cambiar un hábito o crear uno nuevo es necesario saber cuál es el detonante y la recompensa, a partir de ahí deduciremos la rutina. Para encontrar el detonante de un hábito veamos las siguientes preguntas:

¿Qué hora es? ¿Dónde estás? ¿Qué tienes cerca? ¿Qué acabas de hacer? o ¿Qué tienes que hacer? ¿Qué estás sintiendo? o ¿Como te sientes?

La respuesta a una de estas cinco preguntas será el detonante, en base a la situación que experimentemos será una u otra.
Una vez tenemos el detonante vamos a buscar la recompensa, para eso basta una simple pregunta:

¿Qué crees que necesitas para satisfacer el hábito?

Vamos a verlo con el ejemplo anterior, si quiero ir a hablar con unas mujeres y se que mi hábito es huir de ello me pregunto “¿Qué tienes que hacer?” y/o “¿Qué estás sintiendo?”, la respuesta será el detonante.

Detonante: Ir a hablar una mujer desconocida por la calle. Nervios, ansiedad.

Puesto que un estado de nerviosismo y ansiedad no es sano para el cuerpo humano la recompensa se deduce fácilmente al preguntarnos qué necesitamos para satisfacer el hábito.

Recompensa: Salir del estado de nerviosismo y ansiedad.

La rutina será el medio por el cual, a partir del detonante, nos ayuda a obtener la recompensa, en este caso concreto la rutina que conlleva menos esfuerzo es decidir no acercarnos, y así resolver los nervios que nos provocaban hacerlo.

Rutina: No acercarnos a hablar.

Y así ya tenemos completo el hábito, ahora que lo comprendemos pasemos a cambiarlo.
Transformar un hábito que ya cometemos

El primer paso que tenemos que hacer es observar la recompensa, salir del estado de nerviosismo y ansiedad en este caso, e intentar reemplazarla por otra recompensa que pueda satisfacer al hábito, por ejemplo:

Recompensa: Tranquilidad, sentirnos orgullosos de nosotros mismos.

Esta recompensa es aplicable a la situación de acercarnos a la chica y cerrará el círculo, ya que si nos sentimos tranquilos y orgullosos dejamos de lado la ansiedad y nervios anteriores.

NUEVAS RUTINAS

A continuación tendremos que buscar una nueva rutina que se adapte a la nueva recompensa y que parta del mismo detonante.

Rutina: Hablar con la chica, preguntándole una calle.

Es algo simple, que podemos hacer y nos ayudará a reforzar el hábito de hablar con desconocidos, al final quedará algo asi:

Detonante: Ir a hablar una mujer desconocida por la calle. Nervios, ansiedad.
Rutina: Hablar con la chica, preguntándole una calle.
Recompensa: Tranquilidad, sentirnos orgullosos de nosotros mismos.

¡Y ahí tenemos nuestro hábito transformado! ¡Ahora a darle caña cada día para realmente habituarnos!

En el próximo post, SEGUIMOS PROFUNDIZANDO EN CÓMO CREAR NUEVOS HÁBITOS

Seduciendo de día – Conocerse en 5 minutos

Tenía una preciosidad de chica a mi izquierda. Castañita, ojos claros, labios gigantescos, gorrito de lana color rojo, probablemente de unos diecinueve añitos, con un halo de inocencia encima. Pura poesía para los ojos de cualquier ser humano. Ella se miraba con un chico muy atractivo del andén de enfrente.  

Miraban al suelo y otra vez sus miradas se cruzaban, luego al móvil y de nuevo choque de miradas. Daba gusto verlos. Era un baile juvenil y sensual de interés y vergüenza. Toda mi atención estaba centrada en ellos. Ambos esperaban que pasase algo mágico que hiciese que pudiesen decirse lo que realmente pensaban. Sonreí pensando en cuan distinta sería la situación con alguno de mis alumnos en aquel andén. Toda la magia se acabó cuando llegó el tren de la vía de enfrente y desapareció aquel chaval.

El gesto de la chica se hizo más aburrido. Cambió de canción en su Mp3 y miro hacia el infinito. Pensé en lo triste que era que esas dos personas se encantasen y no fuesen a conocerse. Me dio mucha pena que las personas bloqueemos constante nuestra felicidad por motivos varios:

-El chico ese era muy guapo, ¿verdad?

Su boca se abrió de forma bastante cómica, se quitó un auricular y de su boca salió una voz tosca, dura, cómo la que debe utilizar Lady Gaga cuando le dice a su chofer que llegan media hora tarde

-¿Perdona?

Sonriendo le repetí que ese chico era muy atractivo. Con un tono más despectivo aún que antes me dijo que no sabía de qué le estaba hablando.  Decidí que ese encuentro iba a servirle a esa chica para algo.

-No se cómo te llamas, no se de donde eres, pero observando a los demás puedes conocer cosas de ellos. Cómo por ejemplo, yo se de ti que el chico ese te ha resultado muy atractivo y que cuando te miraba a los ojos te sentías más mujer y que cada vez que apartaba la mirada te sentías un poco mal. Estabas deseando que no apartase la mirada.

La chica cambió su cara. Estaba roja. Me miraba pero parecía que su mente estaba completamente absorta por mis palabras. Pasaron un par de segundos hasta que reaccionó con palabras

-¿Haces esto siempre? ¿Eres un freaky del metro o algo?

Me reí. Ahora tocaba presentarse, dejar de ser un desconocido para pasar a ser alguien con nombre y identidad. Pero quería seguir jugando.

-Soy un chico que quiere que la gente empiece a hacer las cosas que les hacen feliz. Por ejemplo, hace dos minutos ni me habías mirado y ahora te empiezo a resultar interesante y hay algo en ti que te pide que lo digas pero no lo haces. Deberías empezar a hacer caso a lo que te pide tu cuerpo desde dentro.

Volvió su estado de shock. Su cara estaba completamente roja y tuve que aguantarme la risa. Me sonó el móvil. Era un whatssup de mi novia. Eso me hizo sentir algo más de empatía por la chica que estaba a mi lado, decidí bajar la intensidad para que no le diese un ataque al corazón, pero antes de que yo le dijese algo ella me dijo para mi sorpresa

-¿Y que más cosas haces?

La chica había cambiado al “modo mandanguero”. Se incorporo y su cuello ya no estaba girado sino que dirigió su cuerpo hacia el mío. Si me hubiese incorporado hacia ella el modo “juguemos” se habría activado, pero no era mi intención darle una dirección sexual a la interacción. Preferí mostrar a esta chica que podemos abrirnos a los demás.

-Antes de que yo te diga que más cosas hago. Háblame de que cosas te gustan hacer a ti. Además de los chicos, ¿que te hace feliz?-La chica se río y se puso a hablar. Seguía sin preguntarle el nombre ni decirle el mío, lo que en cualquier caso habría provocado desconfianza, pero la situación era única para ella.

La chica me hablo de su carrera, de su viaje planeado a los pirineos con no sé que amiga de la carrera…estuvo durante unos tres minutos hablando. Apareció mi metro. “Aeroport” y me levanté. La expresión de la chica era ansiosa, me preguntó cómo me llamaba y le dije que “Jose”, ella me dijo que le dijese mis apellidos para buscarme en Tuenti.

-No tengo tuenti. Lo que tienes que hacer es saludar al próximo chico que te guste en el andén de enfrente. Por cierto, me pareces una chica encantadora y vas a volver loco a cualquier hombre que te conozca.

Me subí al metro en dirección a otra aventura, a otro taller, esta vez era Sevilla la ciudad que me esperaba. Le ordene a mi teléfono que pusiera “Fields of Joy” de Lenny Kravitz y saludé a mi chica por whatsapp. Después pensé en cuantas oportunidades de conocer a personas maravillosas hemos dejado pasar los que alguna vez hemos sido el chico o la chica del andén de enfrente.

La vida postpareja (*): Mi caso personal

Desde que era pequeño, siempre oí que “la vida tiene un curioso sentido del humor”. Y ahora entiendo a que se referían. Es curioso que cuando empecé a escribir esta serie de artículos, yo mismo me encontraba manteniendo una relación con una persona. Una persona increíble, buena y especial para mi. Es más, era quien leía los artículos antes de enviarlos a los chicos de Egoland. Por aquello de “tener otro punto de vista”. Bien, pues lo realmente curioso es que hoy os escribo esto asumiendo mi vida postpareja. ¡Que graciosa es la vida! Esto no lo hago para dar pena, ni para que nadie que lo lea sienta lástima por mi, lo escribo para que os sintáis identificados conmigo y para veáis que esto pasa hasta en “las mejores casas”. A la vez, a mi también me sirve como ejercicio de reflexión y en cierto modo, y como dice mi compañero Yago Bader, para liberarme de mis cadenas personales. No os voy a plantear ejercicios, no os voy a dar claves, sólo os voy a contar una historia que espero que tanto a vosotros como a mi, os sirva para seguir adelante y ser más positivos cada día.

UN CASO PERSONAL

Martes 13 de noviembre de 2012. Me despierto como otro día cualquiera. Feliz, contento con mi vida, con mi trabajo, con mi pareja. Lo primero que hago es pensar en ella. Estaba enamorado. Un pensamiento vino a mi cabeza: “martes y 13, jajajajajaja, como si eso supusiera algo”. Tengo varias sesiones con clientes en mi consulta y uno de ellos, que es lector vuestro, y que por supuesto me dio su permiso para comentar esto, me empieza a hablar de su nueva vida tras superar su propia ruptura. Y este fue el día de las curiosidades de la vida. Yo le dije “todos tenemos que buscar a esa persona que nos hace feliz, yo ya la encontré y se que va a funcionar”. Por otro lado, a las 8 de la tarde me llamó mi primo, y entre las muchas cosas que hablamos me preguntó por mi relación. Le dije: “genial, poco a poco avanzando y yendo a mejor cada día”. ¡Manda carallo! En serio. ¡Manda carallo!.

Habitualmente, por las noches hablaba con mi pareja por whatsapp y comentábamos nuestro día, pero ese día no iba a ser como los demás. A las 11 de la noche me manda un “whass” y me dice que quiere hablar y yo pienso “no puede ser, me va a dejar”. Algo dentro de mi ya se lo olía. Así fue. Hablamos hasta las 5 de la mañana y obviamente no dormí en toda la noche. Lo estábamos dejando. Al día siguiente vino hasta mi casa y me explicó sus motivos. Estaba destrozado por dentro, llorando, en shock. ¡No me lo podía creer! Todas mis ilusiones de futuro, todo mi mundo se derrumbaba delante de mi. Si hasta me imaginaba con ella en el altar (y nunca antes había pensado siquiera en compartir piso con una tía). Motivado por mi rabia o por mi shock emocional, cogí todo lo que tenía de ella en mi casa y lo metí en bolsas. Cuando vino se lo di. Ella también lloraba, sufría, porque para ella yo era importante, pero sus motivos personales eran mucho más fuertes. Hablamos durante horas y no encontramos solución. Se acababa la relación con la persona que más quería. Se iba una persona importante para mi. Apagué el último cigarro con ella, cerró la puerta y se fue.

Los días siguientes consistieron en llorar, no comer, pensar continuamente en ella y por supuesto, negar la realidad. Y tanto la negué que durante cinco días y cinco noches traté de hacer como que nunca había pasado. Quité todas sus fotos, las guardé, eliminé todo lo que me recordaba a ella. La borré de facebook, del whatsapp, etc. El viernes salí para despejarme, y el sábado también. Incluso flirtee con una tía supongo que para paliar un poco el daño emocional. Pero al quinto día, el domingo, me di cuenta de que necesitaba tenerla ahí. Llegué a la conclusión de que era mejor tenerla como amiga que eliminarla de mi vida. ¿Cómo iba a quitar a alguien bueno de mi vida? (os debo decir que lo dejamos a bien y que para ella fue una decisión muy difícil también, por eso quería tenerla de amiga). Ese fue mi problema los primero cinco días. Quería borrar mi pasado, y eso es imposible. La llamé, lo hablamos, y decidimos seguir hablando pero no tanto como antes, y por supuesto, dando un tiempo a que el dolor desapareciera. Y es curioso como eso me hizo entrar de nuevo en la realidad. Lo acepté. Acepté que a partir de ese día ya no iba a ser mi novia, pero si una persona buena con la que había compartido muchas historias. Algunas, las mejores de mi vida.

Entonces llegó la culpa. Ese momento donde yo me empiezo a plantear todo lo que hice mal, y todo lo que podía haber hecho para mejorar. Me masacré durante días con eso. Que era culpa mía (de ella también, por supuesto), que podría haberlo hecho mejor. No veía luz al final del túnel. Me empecé a centrar en mi trabajo para estar distraído, y sí que estaba distraído, pero pensando en ella. Pero de repente algo cambió. Algo dentro de mi me dijo: “ya está bien de compadecerte, ya está bien de sufrir. No va a volver”. Lo asimilé. Me di cuenta de la realidad otra vez, pero esta vez más fuerte. Estuve mal todo el día y gracias a unos buenos amigos que me escucharon desde el día cero, empecé a ver un poco de luz al final de ese túnel oscuro que era mi vida.

Me resigné, acepté la realidad. Y como todos ya sabéis, empecé a desmitificarla. Empecé a ver cosas que antes no veía, empecé a entender cosas que antes no entendía. Y me di cuenta de que durante todo este tiempo mi felicidad había dependido de ella. Porque yo también soy humano y mi autoestima también se daña. Y la coña es que mi autoestima siempre había dependido de lo que dijeran los demás. De cómo me vieran los demás. Siempre había pensado que era infeliz por no tener una mujer a mi lado. Cuando la tuve fui feliz, por supuesto. Pero durante toda mi adolescencia y vida semiadulta me había olvidado de alguien. De mi. Había obviado a la persona más importante de mi vida. Yo. Puede sonar egoísta, pero como dijo Rafael Lechowsky “para aprender a querer a los demás, primero aprendí a quererme a mi mismo”. Y yo no lo hice. Nunca pensé en mi felicidad por mi mismo. Siempre dependí de los demás para ser feliz. ¡Manda cojones que haya que estar en esta situación para darse cuenta de esto! Ayer me desperté dándole vueltas a esto, y mi gran amigo Iván me hizo ver que detrás de cada cosa mala de la vida, siempre hay una buena. Yo ya lo sabía, pero que queréis que os diga, no lo veía.

Y hasta hoy. Me desperté, leí el artículo de Yago y me dije: “liberate de tus cadenas, empieza tu nueva vida pensando en ti. El amor y la felicidad volverán por sí mismo. Sólo necesitas tiempo y ser positivo”. Por eso decidí escribir esto. No lo iba a hacer. Me veía sin fuerzas. Sin ganas. Y si os soy sincero, ahora mismo me encuentro genial. Creo que escribir esto me ayudó a soltar toda mi “rabia” con la vida y me alentó a empezar de cero.

Ahora, creo que ya estoy preparado para escribir el siguiente artículo que es la recuperación. Porque yo ya estoy empezando ese proceso. Y os digo algo que siempre les digo a mis pacientes. En la vida siempre hay momento buenos y momentos menos buenos, y esa es la gracia de la vida precisamente. Disfrutar de todos los momentos que nos brinde la vida. Porque cuando me dejaron descubrí algo. Por primera vez en mi vida me sentí vivo de verdad. Cada segundo importaba, cada minuto era único, doloroso, pero único. Así que os propongo algo y me lo propongo también a mi mismo. VAMOS A EMPEZAR UNA NUEVA VIDA, VAMOS A EMPEZAR OTRA VEZ. RECORDANDO TODOS LOS BUENOS MOMENTOS QUE TUVIMOS CON NUESTRAS PAREJAS. APRENDER DE NUESTROS ERRORES. VAMOS A CREAR RECUERDOS NUEVOS Y POR FAVOR, VAMOS A SEGUIR ADELANTE.

Me despido y os recuerdo que muy pronto tendréis la ultima parte de esta serie de artículos. LA VIDA POSTPAREJA (IV): RECUPERACIÓN. Espero que os guste y que me dejéis muchos comentarios y por favor, no sintáis lastima por mi, porque ya estoy en fase de recuperación.

P.D.: que este artículo sirva como el punto inicial de mi nueva vida.

JORGE

Herramienta de seducción: Ponte en mi piel (III) Sexo

Siguiendo con la herramienta de seducción propuesta anteriormente, vamos a intruducir el sexo en nuestras relaciones.

[button color=»red» link=»https://www.egolandseduccion.com/herramienta-ponte-en-mi-piel-i/» size=»medium» target=»_blank» font=»georgia» textcolor=»#FFFFFF» bgcolor=»#500752″ align=»center»]Herramienta Ponte en mi piel[/button][button color=»red» link=»https://www.egolandseduccion.com/herramienta-ponte-en-mi-piel-ii-ejercicios/» size=»medium» target=»_blank» font=»georgia» textcolor=»#FFFFFF» bgcolor=»#500752″ align=»center»]Ponte en mi piel: Ejercicios[/button]

Como hemos apuntado en otras ocasiones debemos ser claros y certeros en nuestro mensaje. Y además contando con los dos pilares fundamentales para conseguir cambiar conductas y pensamientos vamos a seguir apelando a su autoconcepto, es decir, a lo que ella piensa de si misma y a su autoestima, o sea, cómo ella se siente consigo misma.

Al querer conseguir determinadas situaciones, actos o posturas sexuales, una vez más nos podemos encontrar con una negativa o un rechazo.

Seguramente porque ella no ha probado lo que le proponemos, porque quizá cuando lo probó anteriormente con otra persona no tuvo una experiencia positiva o porque considera que todavía no hay entre nosotros la suficiente confianza o compromiso para realizar algun tipo de cosas en la cama que para ella deben realizarse con un tipo de relación más larga o sólida.

Vamos a la raiz del problema de la manera más directa. Como no podría ser de otro modo desde egolandseducción: Su mente consciente.

Qué es ella para sí misma? Si estamos con una mujer válida e inteligente, ella es algo valioso.

Cómo se siente ella consigo misma? Mal si accede a nuestra petición por los motivos anteriormente explicados.

Pongamos en práctica nuestra herramienta:

-Ynés, ¿qué harias tú, si fueras yo, tuvieras a una mujer tan sumamente poderosa por generarme este apetito tan masculino y visceral y encima la tuvieras piel con piel como si estuvieramos cosidos por un hilo invisible? ¿No querrías sentir cada átomo de nuestro deseo? ¿No intentarías comprobrar qué está pasando y hasta donde podemos llegar a expresar lo que nos generemos?

De esa forma utilizaríamos la herramienta.

Por supuesto podemos utilizar otras herramientas y desarrollar una conversación de escucha y entendimiento utilizando el paradigma ganar/ganar para conseguir nuestro objetivo.

Siempre sin imponer nuestros deseos de una forma autoritaria cuando ellas no están jugando a sentirse dominadas.

El sexo, para mi, siempre ha sido una forma de conocerse, no un objetivo. Por eso, como todo, para algunas mujeres es necesario conocerse sexualmente de forma gradual. Respetemos sus necesidades avanzando sexualmente hasta donde podamos.

Y pasaoslo bien, chicos!!!! Como? Disfrutando de hacer disfrutar.

La Mediación Sentimental

¡Hola a todos!
Como algunos sabréis, hace unas semanas Luís y yo participamos en el Foro Mundial de la Mediación. Me gustaría contaros qué es lo que hicimos allí.

Algunos sabréis también que me dedico a la mediación, en mi caso particular, la mediación intercultural. Además de ser Licenciada en Psicología, conseguí la Acreditación oficial otorgada por la Conselleria de Solidaridad y  Ciudadanía, por la que se regula la acreditación de la figura del mediador/a intercultural y el Registro de Mediadores Interculturales de la Comunitat Valenciana. Trabajo intentando ser alguien imparcial que ayuda a que las personas con diferencias culturales resuelvan sus conflictos de una manera satisfactoria para todas las partes implicadas. La mediación es una nueva manera de enfocar los conflictos, y en los últimos años se ha aplicado a muchísimos ámbitos (judicial, familiar, sanitario, etc…). Cada vez son más las áreas en las que las herramientas de la mediación pueden utilizarse para resolver conflictos.

Cuando empecé a trabajar en Egoland para tratar asuntos relacionados con los conflictos en las relaciones, lo hice, obviamente desde la perspectiva de la mediación, ya que es mi profesión y para lo que me he formado. Tanto Luís como yo fuimos dándonos cuenta de que en realidad estábamos creando una nueva modalidad de mediación, extrapolando las herramientas de ésta y creando algunas nuevas específicas para este ámbito teniendo en cuenta el punto de vista de la Psicología Heterosocial, así que decidimos llamarlo “Mediación Sentimental” y establecer las bases teóricas para ésta.  Redactamos un trabajo explicando qué es y para qué sirve y lo enviamos al foro Mundial que, casualmente, este año se celebraba en nuestra ciudad. Nos lo aceptaron y lo expusimos allí. Esto fue algo muy importante y muy motivador, ya que es la institución internacional con más prestigio en el ámbito de la mediación, y que nos aceptaran el trabajo es una manera de que nuestra teoría se vea respaldada por ellos, y por tanto, sea considerada válida. Es decir, lo que sospechábamos tiene ahora no sólo toda nuestra credibilidad, si no también la del Foro Mundial de la Mediación. Supongo que podéis imaginar lo que eso significa para nosotros. Y bien ¿Qué es esto de la mediación Sentimental? A continuación os pego un extracto de nuestro trabajo, para que lo entendáis.

LA MEDIACIÓN SENTIMENTAL

Creemos firmemente que cada vez más, las parejas actuales entienden la necesidad de incorporar nuevas herramientas que les ayuden a un mejor funcionamiento y que no necesariamente pasan por una terapia de pareja, puesto que muchos conflictos pueden solucionarse simplemente con una mejor destreza comunicativa y con la búsqueda de un acuerdo que satisfaga a ambas partes, pero que ellos, por su naturaleza de miembros de la pareja, no consiguen encontrar. Es ahí donde la figura del mediador, como un tercero imparcial, puede redefinirse para actuar junto a las parejas.

AREAS DE LA MEDIACIÓN SENTIMENTAL

– El área de intervención o la mediación propiamente dicha, donde el mediador desarrolla su actividad junto a la pareja a fin de encontrar una solución para el conflicto

– El área de prevención. Creemos que una relación sentimental sólida, satisfactoria y estable se sustenta por muchas más razones que el simple amor romántico. El amor es un sentimiento, pero una relación sentimental es la aplicación de ese sentimiento a un sinfín de conductas que no tienen por qué desarrollarse de manera satisfactoria por el simple hecho de que exista un sentimiento amoroso. Todas las personas podemos ser más capaces y hábiles de gestionar una relación que nos satisfaga si aprendemos las herramientas necesarias para ello. Creemos, además, que podemos disfrutar mucho más de ese amor si estamos capacitados para llevarlo a la práctica y optimizar las oportunidades de desarrollo personal que éste nos brinda. En definitiva, podemos ser más felices con una formación que nos lleve a sacarle todo el partido al amor.

Estas herramientas son muy variadas: asertividad, empatía, control emocional, autoestima, autoconcepto, resolución de conflictos, negociación… […]Nos resulta muy llamativo como cada vez más, en nuestra sociedad se generan recursos para encontrar pareja de lo más diverso, adaptados a las necesidades de los nuevos tiempos y contando con las ventajas que estos nos ofrecen. Igualmente, cada vez un número más amplio de personas se interesa por conocer técnicas de seducción y quieren aprender a mostrarse más atractivos tanto física como intelectualmente.

Es evidente que la búsqueda de una pareja sentimental sigue siendo un eje central para la mayoría de los seres humanos, aspiren a formar una familia o, simplemente, a desarrollar una relación íntima con otra persona. No obstante, la mayoría de los esfuerzos, como venimos observando, se encaminan hacia la búsqueda y consecución de esa pareja, si bien no tanto al hecho de mantenerla, cimentarla y sobretodo, disfrutarla. Creemos que este vacío puede llenarse con la mediación sentimental, para capacitar a las personas que aspiran a mantener una relación estable (la tengan ya o estén a la búsqueda de la misma) con las herramientas necesarias para hacerlo de una manera efectiva, funcional, madura y sobretodo, satisfactoria.

Y en ello estamos. En breve tendréis noticias a este respecto y os podremos contar con más detalle qué es lo que tenemos en mente, para poder ofreceros esta nueva manera de entender las relaciones interpersonales.

¿Qué os parece? ¡Contadnos!

Libertad: Transformarnos desde los hábitos (II)

Nos arrepentimos, nos frustramos, nos decimos que nunca volverá a pasar, decidimos cambiar,  y al final volvemos a encerrarnos en el mismo círculo. ¿por qué repetimos una y otra vez el mismo proceso?

 

Liberación

Todos nacemos libres, pero en el camino nos vamos encadenando poco a poco, nuestra estructura moral y psicológica se va formando con nuestro crecimiento y nos va condicionando.

Si miráis a cualquier niño pequeño veréis que su estructura moral es muy distinta a la vuestra, no tiene miedo de expresarse como quiere ya que, entre otras cosas, a esa edad sus acciones están mucho más aceptadas socialmente, pero a medida de que vamos creciendo esa aceptación social va cambiando y se espera que cumplamos ciertos cánones de educación, responsabilidad, decencia, etc.

Es decir, nos vamos encadenando. Una vez estamos encadenados, estamos jodidos.
Muchas veces no podremos expresar lo que sentimos, no podremos actuar como queremos, no podremos ni cumplir las metas que deseamos, ¿por qué? Porque estamos limitados.

Las Cadenas

“Las cadenas” son los factores que han condicionado nuestra conducta a lo largo de nuestra vida,  comprenden mayormente toda la influencia que hemos sufrido por parte de la educación y del entorno.

Yo las divido en tres partes:

1Educación Directa: Es el aprendizaje y la evolución producida por medio de influencias directas y referentes importantes para nosotros. (Padres, hermanos, amigos muy cercanos, mentores, personas que admiramos…) Suele ser la más determinante y la que más impacta en nosotros.


2Educación Indirecta: Parecido al anterior, es el aprendizaje y la evolución producida por medio de influencias con menos importancia para nosotros que las directas. (Música, televisión, cine, libros, revistas, la consciencia colectiva…)


3Entorno: Una vez más, es el aprendizaje y la evolución producida por medio de las influencias que conforman nuestro LUGAR y MOMENTO de nacimiento, y todo lo que eso conlleva. (Ideología Religiosa, Ideología política, clima, cultura, historia, influencias regionales…)

Durante toda vuestra vida habéis estado actuando influenciados por estos tres aspectos. Aspectos que, muchas veces, os impiden expresaros como queréis, aspectos que hacen que sufráis, que os arrepintais y que no os dejan fluir con lo que sentís. Ahora bien, debéis saber que no podemos vivir sin cadenas, siempre van a existir factores condicionantes para nuestra manera de ver el mundo y como actuamos sobre el. Así que si queremos sentirnos más libres lo que tenemos que hacer es transformar nuestras cadenas por defecto a otras que me beneficien más en mi entorno y vida, es decir, elegir YO las cadenas que poseo. Veamos cómo podemos hacerlo:

¿Cómo funcionan las cadenas?

Como ya hemos visto, las cadenas son el resultado de la mayor parte de la educación que hemos recibido a lo largo de nuestra vida, y nos condiciona durante toda esta misma. Ahora bien, ¿por qué nos afectan tanto las cadenas? Porque construyen nuestra actitud.

Como ya sabéis, la actitud es la forma de actuar de una persona, el comportamiento que adoptamos para enfrentarnos a todas las circunstancias que nos rodean, y la educación que recibamos influirá enormemente en este aspecto. Por ejemplo, nacer en África o en Móstoles (Entorno) o que nuestros padres, cada vez que hablamos con los niños vecinos, nos digan que son mala gente (Educación Directa).

¿No creeis que este tipo de cosas influirá mucho en nuestra manera de actuar y de relacionarnos con la gente? Pues yo estoy convencido de que sí.

Una vez entendemos que nuestras cadenas conforman, en mayor o en menor medida, nuestra actitud hay que pasar al siguiente paso, a las conductas concretas que nos impiden actuar de la manera que deseamos.

Nuestra actitud genera unas conductas y esas conductas, a lo largo del tiempo y de reincidir en ellas, generan hábitos (práctica adquirida por la repetición de un acto).  Así que si, chicos, somos un cúmulo enorme de hábitos y de conductas limitantes que repetimos una y otra vez sin darnos cuenta.

Por supuesto, no todas nuestras conductas van a ser erróneas para relacionarnos con nuestro entorno, vamos a ver, nuestros padres no nos educaron tan mal, así que el primer paso para liberarnos sería detectar esos hábitos nocivos para nuestros objetivos. Una vez detectado ya podemos a proceder a cambiar ese hábito nocivo y transformarlo en uno más apto para el objetivo que busquemos conseguir.

Esquema que enseña la influencia de nuestras cadenas y cómo transformarlas.

Repasando hasta ahora

Las cadenas (Ed. Directa, Ed. Indirecta y Entorno) influyen de una manera tremenda en nuestra actitud, llegando a estar esta muy condicionada por estos tres aspectos.

Una actitud generará, con el tiempo, conductas concretas ante estímulos similares. (Si tenemos una actitud introvertida seremos más propensos a exhibir una conducta tímida ante grupos sociales)

Las conductas concretas generan hábitos que pueden ser positivos o negativos, estos hábitos pueden ser transformados a otros más efectivos. (Si solemos tener conductas tímidas y no participamos en las conversaciones con gente nueva nos habituaremos, haciendo mucho más difícil romper ese hábito en un futuro)

Cuanto más repetimos un hábito, más lo reforzamos e interiorizamos. Y por lo tanto, potenciaremos más las conductas concretas que los forman. (Cuanto menos nos comuniquemos y sociabilizemos, más se reforzará nuestra conducta tímida)

Transformar los hábitos negativos o crear nuevos hábitos nos permitirá asumir nuevas conductas, y por lo tanto, poco a poco ir transformando nuestra actitud hacia lo que queremos conseguir.  Es decir, deberíamos hacer el camino inverso, desde nuestros hábitos hacia nuestras cadenas, para conseguir un cambio en profundidad.

Ejemplo:

Hacemos un curso en egolandseducción y eso nos introduce el hábito de salir a conocer mujeres a la calle cuando queramos, repetir este hábito va a generar una serie de conductas concretas (nos volveremos más ingeniosos, divertidos, observadores y experimentados al respecto), esa serie de conductas, cuando se van acumulando en un gran número, terminan incidiendo de gran manera sobre nuestra actitud, ayudándonos a transformarla y por tanto, crear nuestras propias cadenas.

Cómo plantear un trío a nuestra pareja…y tener éxito

Cómo plantear un trío a nuestra pareja…y tener éxito

Todos tenemos fantasías, ensoñaciones e imágenes que vienen a nuestra mente en momentos insospechados y a veces sospechosos. A modo de aviso, os anticipo que nuestras fantasías no se esfuman por tener una pareja estable. De hecho, a veces esa estabilidad, nos genera e inspira otras fantasías que enriquecen, modifican o se suman a las que ya arrastramos antes de ennoviarnos o desennoviarnos.

Los mejores consejos para conseguir un trio con tu pareja desde la psicología masculina y femenina

O dicho de otro modo, por tener pareja:
  [dropcap color=»000000″ font=»arial» fontsize=»30″]1[/dropcap]Que ninguna chica se crea que va a dejar de imaginar en la ducha al policía de barba de tres días que la detiene y la registra contra la pared con lo que viene poco después,  y
  [dropcap color=»000000″ font=»arial» fontsize=»30″]2[/dropcap]Que a ningún chico se le ocurra pensar que, por tener novia, se va olvidar de imaginarse en un sillón con una pareja de féminas, una rubia con coletas y una negra de boca inmensa arrodilladas ante él, interesadas en su entre pierna…

Consultorio Cadena Ser – Proponer un trío a mi pareja

 
[button color=»red» link=»https://www.egolandseduccion.com/debate-de-la-semana-los-trios-son-eticos/» size=»medium» target=»_blank» font=»georgia» textcolor=»#FFFFFF» bgcolor=»#500752″ align=»center»]Opina sobre la conveniencia de los tríos aquí[/button]

FREUD: ENTENDER LAS FANTASÍAS SEXUALES

Vamos a utilizar a Freud para ubicarnos siguiendo su teoría de la mente y responder a estos conflictos internos con los que a menudo nos encontramos.

El Ello. Es la zona de la mente donde residen los deseos e instintos. Actúa según el llamado principio del placer; es decir, está motivado por todo lo que puede producir un estado de agrado. No tiene en cuenta nuestra realidad exterior solo se rige por la autosatisfacción.

El Yo. Sería un grado superior al Ello, controlándolo. Diciendo decidiendo si es o no oportuno satisfacer los instintos y organizándolos. Se rige por el principio del dolor o malestar. Su comportamiento es más realista que el del Ello, pues ya toma conciencia de los estímulos negativos del exterior y condiciona la conducta para evitarlos. Incluye lógica y coherencia en el comportamiento.
Sobre todo, tiene en cuenta los peligros y las posibilidades de evitarlos. Su tarea es la autoconservación, y utiliza todos los mecanismos psicológicos de defensa que sean precisos para lograr su objetivo.

El Superyó. Sería el grado superior que enriquece al YO mediante la ética, haciendo interiorizar el concepto de lo prohibido.
El exterior ya no es sólo placentero (como concibe el Ello) o doloroso (como añade el Yo), sino que también puede ser moralmente bueno o malo y, por tal motivo, prohibido. Nuestro amigo superyó se encarga de hacernos sentir culpables y de nuestros  «remordimientos» de conciencia.
«Haciendo un símil, entendible, podríamos comparar la relación Ello-Yo-Superyó a la existente entre el caballo, el jinete y el entrenador en una competición hípica: el jinete —el Yo— controla que el caballo —el Ello— no se desboque y, al tiempo, sigue los consejos de su entrenador —el Superyó— para hacerlo bien. El acuerdo de los tres culmina con el éxito.»

Las fantasías sexuales danzan a sus anchas en nuestra mente y en función de la educación que tengamos vamos a poder sacarlas a la pista de baile con mayor o menor comodidad.
¿Tener pareja y masturbarse pensando en otras personas es censurable?
¿Tener pareja e imaginarse un trío me hace sentirme culpable?

Pues habrá que elegir cómo queremos convivir con los constantes conflictos que nos va a proponer nuestro querido «ello» y con el que van a tener que lidiar nuestro «yo» y  «superyó». Y digo esto, por las muchas personas que me he encontrado en mis consultas que no acaban de entenderse a sí mismas respecto a sus fantasías.

Vamos a poner el ejemplo de ésta oyente que le apetece hacer un trío y no tiene claro si se siente mal, bien, cómo proponérselo a su pareja, etc…

Como hemos dicho, las fantasías son algo natural, normal que todos tenemos. Así que lo primero que tiene que tener claro es que:

CULPABILIDAD

Por tener fantasías, teniendo pareja: NO HAY QUE SENTIRSE CULPABLE. Nuestras parejas también las tendrán, lo digan o no, tod@s tenemos mentes vivas y necesitadas de estímulos, y el sexo es uno de los principales

INFIDELIDAD

TENER FANTASÍAS SEXUALES con una frecuencia relativamente frecuente y relativamente intensa no quiere decir que NO SE ESTÉ ENAMORADA/O DE SU PAREJA y  por tanto no implica serle infiel.

CUÁNDO PLANTEAR FANTASÍAS

pareja en la cama fantasiasEL MOMENTO de plantear fantasías de trío u otas fantasías es en la cama:

La mente está abierta, estamos excitados y nuestra pareja también lo está, nos dejamos llevar más fácilmente y evitamos bloqueos mentales, sociales o inhibición sexual

FANTASÍAS GRADUALMENTE

Las fantasías sexuales las podemos planteas de  MODO GRADUAL: Es decir, utilizando el ejemplo del trío de la que hablaba nuestra oyente, durante el acto, vamos a plantear primero que «nuestra pareja se imagine que hay otra persona en la habitación, luego que nos está mirando… » en función de su reacción seguimos o paramos, de forma que se vaya acostumbrando a este tipo de frases…. «imagínate que empieza a acariciarnos…, etc.

UN TRÍO, ¿CON QUIÉN?

Para los hombres es mucho más factible que accedan a realizar un trío empezando con dos mujeres y no con otro hombre. Por aquello de no herir su ego masculino, tenemos que tener esto en cuenta sobre todo el punto anterior de hacerlo de manera gradual.

ESTABILIDAD DE LA PAREJA

Los tríos hay que plantearlos en momentos de estabilidad de la relación, NUNCA EN MOMENTOS DE CRISIS EN LA PAREJA…
Ya que podría tomarse con un síntoma inequívoco de que la relación no solamente hacia aguas como binomio sino también como tándem sexual.

JUEGA EN LA CAMA, VERBALIZA EL TRÍO

El mero hecho de jugar a que se hace un trío, verbalizar y simular un trío en la cama con nuestra pareja puede satisfacer en sí misma esa fantasía sin tener que llevarla a cabo de forma efectiva.trio-pareja-fantasia

ENTENDER A NUESTRA PAREJA

 Si proponemos hacer efectiva una fantasía o jugar a simularla, tendremos que estar dispuestos a jugar a simular una que satisfaga a nuestra pareja, y por tanto deberemos tener una formación de empatía, asertividad y capacidad de negocación básica.

Así pues, queridas y queridos, fantaseemos sin miedo, propongamos a nuestras parejas sin miedo pero con tacto, si queremos evitar problemas no repitamos en nuestras amigos comunes de la pareja… Y SOBRE TODO MUCHA MANDANGA!!!!
Siempre vuestro, EGOH.