Personalidad seductora (III) Vive el presente.
¿Te preguntaste alguna vez cómo definirías a la seducción?
Piénsalo por un momento. (AQUÍ ESPACIO PARA PENSAR). Para mi, la seducción va sobre quienes somos y sobre cómo nos relacionamos con los demás. Sobre conocernos bien, en un proceso de desarrollo personal vital, y sobre la manera en que nos movemos sobre el mundo y con las personas que lo pululan. Así, la clave es ambos casos es la integridad. Ser honestos y coherentes, empezando por nosotros mismos para pasar a aplicar esto a nuestra relación con los otros.
COHERENCIA CONTIGO MISMO/A
No somos coherentes con nosotros mismos si no nos acercamos a hablar con esa persona que nos gusta. ¡Es lo que realmente deseamos hacer en ese momento, viendo a esa chica a la que también le queda ese vestido veraniego, acompañado de una mirada dulce! O a ese chico que se muestra tan desinhibido y divertido y que además tiene un porte genial.
HONESTIDAD CON LOS DEMÁS
Somos honestos con los demás si nos acercamos con un que, porque, para que y qué me haces sentir. “Verás Carlos, la verdad es que sí me gustaría que quedásemos más veces, porque me apetece saber más de ti. Podemos seguir compartiendo aficiones, me siento cómoda quedando contigo”.
Una muy buena manera de ejercitar este quienes somos y cómo nos relacionamos es el estar presentes.
ESTAR PRESENTE, AQUÍ Y AHORA
Simplemente ser, ser junto a quien tenemos delante. Estar presente en ese momento junto a esa persona. Que el encuentro no se altere ni deforme por las cosas que nos influyen de nuestro pasado o lo que esperamos que pueda suceder. Que la mente no revolotee pensando si va bien o menos bien nuestro encuentro y cuál va a ser nuestro próximo movimiento. Tender a fluir, a ser naturales y no a desarrollar estrategias que al final convierten la interacción en «check points». ¿Ves la relación de esto con la honestidad y la coherencia? No somos coherentes si no facilitamos el proyectarnos al futuro (por ejemplo conseguir una cita con esa chica que nos ilusiona) o si estamos pensando en aquello que nos dijo nuestro amigo por la mañana y nos molestó, rompiendo el momento.
Además, porque cuando estamos pensando en qué hacer y en qué decir, estamos perdiendo una de nuestras cualidades más seductoras: permanecer presentes junto a quien tenemos delante. Seamos cómplices del momento y de quien tenemos enfrente.
¿Cómo podemos practicar nuestra presencia en la relación?
–> Abre tu atención y reconoce en una interacción cuando tu pensamiento se aleja demasiado de lo que está pasando con quien tienes delante, lejos del momento que estás viviendo.
–> Comprométete hoy mismo a estar más presente con la gente que conozcas. Sea con tus compañeros de trabajo, amigos, familia o pareja. Les harás, además, sentirse escuchados e importantes.
–> Di aquello que estás pensando en ese momento, compártelo con tu cita. Si hay algo positivo en que estés pensando en otras cosas (lo cual es muy común) es que ello te proporciona un inacabable suministro de temas de conversación. Puedes utilizarlo a modo de herramienta, “vive el presente”. Lo que sucede cuando hacemos esto, es que volvemos a estar presentes y de nuevo retomamos la interacción. Volvemos a ese momento con esa persona.
Paralelamente, no dejes de lado el conocerte mejor. Sin máscaras, consiguiendo una visión más clara de quien eres y de cómo lo comunicas, Seduciéndote a ti misma/o. Practica la presencia con quien tienes delante y esa persona lo hará contigo. ¿Utilizas esta manera de comunicarte habitualmente? ¿Piensas que haciéndolo te convertirás en alguien más atractivo/a? Espero tus preguntas, dudas, piropos o chascarrillos más abajo ¡Un positivo abrazo!
PD.- recuerda que tienes dos artículos anteriores de esta misma serie, La clave para ser tu misma/o y Descubre que seduce de ti