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¿Para qué sirve seducir?

A todos nos gusta seducir, pero ¿para que?
Evidentemente, la razón principal es conectar con una persona que nos interesa, pero, ¿somos conscientes de todas las ventajas que nos ofrece seducir diariamente a nuestro entorno?

Luis Tejedor (Egoland) en esta charla, nos explica todas las utilidades que puede tener seducir, y con tantas utilidades, es hora de ir haciéndolo.

 

¿Para qué sirve seducir?:

Herramienta de seducción: Ya que estamos

NUEVA HERRAMIENTA: YA QUE ESTAMOS…

Queridos amigos mandangueros, estoy de vuelta. Ya os echaba de menos. Y por favor, contestadme que vosotros a mi también.

He hecho muchos talleres, he estado de vacaciones y bla bla bla bla…

Hoy os quiero hablar de una nueva herramienta para la conversación en el avance de las interacciones.
YA QUE ESTAMOS..

Este finde semana estaba con mi amigo Joseba, en un taller. Él me preguntaba la forma de facilitar e introducir nuestros intereses, nuestras propuestas, nuestras apetencias.. DE AVANZAR.

herramienta conversacion brillante ya que estamos

Además de  las herramientas expuestas en el libro, a la hora de responderle algunas fórmulas, surgió una nueva solución, a mi parecer, como siempre, espontánea, real, eficaz y sobre todo NATURAL…

Cuando estamos hablando con alguien, si os dais cuenta, YA ESTAMOS HABLANDO con esa persona. Con lo que YA QUE ESTAMOS, vamos a profundizar en nuestra relación.

Cuando estamos conociendo a una persona, YA ESTAMOS CONOCIÉNDONOS. Con lo que YA QUE ESTAMOS, vamos a conocernos más.

Cuando estamos compartiendo un momento íntimo con alguien, YA ESTAMOS INTIMANDO. Con lo que YA QUE ESTAMOS, vamos a intimar más…

Cuando la gente está pendiente de ganar valor, de hacer rutinas, de fases en la interacción, no se ayuda a sí mismo a ser consciente de lo que está sucediendo…

Utilicemos el espectador de la película subtitulada…

 «Hay un chico y una chica que ya están hablando»

Si hiciéramos un narrador, Narraríamos que «nos estamos conociendo» y eso nos gusta… o NOS INsPIRA…

Es decir, estamos utilizando TRIÁNGULO DE HELIO : Observamos, cualificamos esa interacción y comunicamos nuestra emoción
Ahora queremos más…

YA QUE ESTAMOS conociéndonos y estamos a gusto.. Vamos a conocernos más… Quizá asegurándonos que nos vamos a volver a ver dándonos los números de teléfono. O quizá invitando a la persona que tenemos delante a un lugar más tranquilo e íntimo. ¿Nuestra casa, quizá?
Estamos quedando a menudo con una chica a menudo, y YA QUE ESTAMOS, que tal si se la presentamos a nuestros amigos, para consolidar nuestra relación… YA QUE ESTAMOS…

Mi reto, y el del equipo de EGOLAND siempre ha sido simplificar la seducción y desmitificar eso de que para relacionarnos con las personas que nos rodean, incluidas las personas que nos atraen, haya que estudiar una especie de carrera universitaria que nos aleja y nos distancia de comunicarnos con precisión y naturalidad.

Y aplicando esta herramienta, por muy sencilla que parezca, tengo claro que nos ayuda a nosotros a elegir mejor qué queremos que suceda y a la persona que tenemos delante a entender y aceptar nuestros intereses…

Así que os invito a vivir el presente y a utilizar esta herramienta… Os puede ser útil, ¿no?… ¿Ya que le estáis conociendo? ¿Ya que estamos?

Siempre vuestro, EGOH.

Herramienta Seducción: Me gustarías más si…

¿Cuántas veces habré escuchado  frases como “vas muy rápido” “parece que pases de mí” , “tú eres muy demasiado golfo”? Yo diría que muchas.

Chicas, ¿Cuántas veces os habéis encontrado con conductas en ellos que no os molaban un pelo y os habéis quejado.

-Eres un egoísta.

-Eres un celoso.

-Eres un pesado.

Al final, chicas y chicos, todos estamos hablando de una queja que sustantivamos o adjetivamos:

-Sergio, te he dicho mil veces que Carlos es sólo un amigo. Eres un celoso y me jode que no tengas confianza en mí.

-Pablo, me lo he pasado muy bien contigo, y me resultas atractivo. Pero parece que si  no me acuesto contigo la primera noche parece que esto se vaya a acabar aquí.

-Diana, ¿cómo puedes ser tan antipática?

-Esther, ¿eres muy pesada. Te he dicho mil veces que me gusta el futbol y los domingos toca quedar con mis amigos.

Eres, haces cosas que no molan. O mejor dicho. No nos molan.

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HERRAMIENTA DE SEDUCCIÓN ME GUSTARÍAS MAS SI

Recuperando el espíritu de la bilateriladad que nos abandera versus la uniteralidad de las conductas hasta ahora conocidas en la seducción,  hace tiempo creé una herramienta que me he ayudado mucho y está ayudando  a mis alumnos en los talleres que imparto.

La bauticé como ME GUSTARÍAS MÁS SI:

En ella en lugar de expresar el adjetivo o el sustantivo que describe la conducta que detestamos de la persona que nos atrae : Eres un egoísta, eres una chica muy borde y antipática, lo que hacemos es:

1º Enumerar las cosas positivas que tiene la persona o que nos generan 

2º Decirle cómo nos gustaría más: indicándole la conducta o el adjetivo que se identificara con lo que deseamos.

Ejemplo DE LA HERRAMIENTA DE SEDUCCIÓN: ME GUSTARÍAS MÁS SI

Ejemplo para chicas:

-Sergio, eres un cielo. Me encanta gustarte e importarte, que me cuides y que estés pendiente de mí, pero creo que me gustarías más si tuvieras menos miedos y confiaras más en mí.

-Pablo, realmente me estás resultando atractivo, me pareces un chico muy guapo y divertido pero creo que me lo resultarías más si no pusieras tanto énfasis en acostarnos ya, esta misma noche.

 

Ejemplo para chicos:

-Diana, eres una chica impresionante y muy atractiva. Pero creo que lo serías más si fueras más sonriente. Si valoraras más el hecho de que un hombre se acerque a conocerte.

-Esther, me pones a cien. Contigo estoy conociendo partes de mí en nuestra relación que me están sorprendiendo. Pero creo que me harías más feliz si entendieras que querer ver el futbol con mis amigos los domingos no quiere decir que te quiera menos o que no quiera compartir cosas contigo.

 

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RESUMEN DE LA HERRAMIENTA PARA LIGAR: ME GUSTARÍAS MÁS SI… 

La herramienta ME GUSTARÍAS MÁS SIes una herramienta de persuasión, de comunicación y de expresión muy efectiva para hombres y mujeres que nos va a permitir conseguir las cosas que nos propongamos sin que la gente se sienta atacada en un primer momento, sin forzar pulsos autoritarios o tengamos que demostrar VALOR fictício entendiéndonos como entelequias de hombres alfa o mujeres fatales.

Es sencillamente una nueva herramienta creada desde EGOLAND para que la psicología explique y resuelva situaciones entre personas. Es el nuevo enfoque creado desde EGOLAND de bilateralidad versus unilateralidad que es lo que hasta ahora se ha conocido en el mundo de la seducción.

Es sencillamente, comunicarse de forma más inteligente.

Aquí tenéis el audio en la Cadena Ser de esta herramienta 

En breve la parte 2: EJERCICIOS

La inglesa en la disco; Seducción nocturna

 

-¿Pero tú de dónde sales? (Quizás una de las frases que más he escuchado últimamente. Al principio me sorprendía y me halagaba. Ahora apenas me llamaba la atención.) ¿Pero tú de dónde has salido?. Repitió ella con los ojos abiertos como platos y una expresión que denotaba asombro y deseo a partes iguales.

Si te lo dijera nos veríamos obligados a huir juntos y escondernos en alguna isla recóndita– Le contesté yo.

 

Ella era una inglesa de entre 25 y 30 años, rubia, delgada, de facciones armónicas, con escote sugerente y una camisa y pantalones vaqueros que realzaban su cadera y estilizadas piernas.

Nos habíamos conocido en una discoteca de esas que me gustan a mí. Poco pijerío, música rockera, buen ambiente y gente atractiva. Era carnaval y por si no lo sabíais a mi me da por ponerme corbata en fechas tan señaladas como esa. Nuestras miradas se habían cruzado cerca de la barra y la sonrisa que le dediqué dejó claras mis intenciones. Me acerqué mientras ella estaba pidiendo una copa.

-Por cómo te vistes tienes pinta de saber algo de estilo. ¿Cómo me ves esta noche?

 Ella sonrió.

-No está mal– contestó con buen español pero innegable acento inglés –Pero llevas la corbata un poco suelta

Mientras lo decía, sus manos se dirigieron al cuello de mi camisa y empezó a ajustarme la corbata. Señores, si hay algún indicador de interés más grande que una chica dedicándose a arreglarte la corbata, que bajen los dioses de la mandanga y me lo digan.

 

-¿Te das cuenta de que ahora sería muy descortés por mi parte no presentarme? Yo soy Pau, ¿tú eres…?

Rachel– respondió mientras nos dábamos un par de besos.

-Rachel, está muy claro que no eres de aquí y que entiendes más que yo de nudos de corbata. Cuéntame.

 

Mientras nos tomábamos nuestra copa me explicó que era londinense, que llevaba un año trabajando como profesora de inglés y que estaba con sus alumnos celebrando el fin del semestre. Mientras lo hacía y ante la constatación de que se trataba de una chica atractiva, yo me dediqué a escucharla, observarla y cualificarla con humor.

Ante chicas atractivas me suelo decantar por lo que yo llamo cualificación inversa. Me centro en cualificarlas predominantemente por factores conductuales o textuales (sin obviar el aspecto físico)  mientras que ante chicas no tan atractivas pero igualmente estimulantes intento realzar de forma creíble sus atributos físicos. No sé si sería una cita de Ovidio pero el lema vendría a ser algo así como “a la guapa, dile que es lista. Y a la lista, dile que es guapa”. De esta forma nos desmarcamos del resto de hombres: las chicas atractivas son conscientes de la influencia de su físico sobre los hombres, pero no están acostumbradas a que las valoren por otros atributos.

Decidí ir animando la conversación y sexualizar. Al fin y al cabo era carnaval.

 

-Como profesora de idiomas seguramente tendrás un vocabulario muy amplio. ¿Si tuvieras que definirte con dos adjetivos cuales usarías?

-Mmm, no sé… ¿Divertida e inglesa? Dijo a carcajadas.

-Ya, pues a mi me gustan las mujeres divertidas y que suponen un estímulo intelectual. Lo de si son inglesas o no lo dejo a elección suya

 

Ella río. Cada vez se la veía más atraída. Empecé a jugar fuerte:

 

-¿Y cómo te gustan a ti los hombres?

-Yo diría que atléticos, divertidos y honestos

-¿Morenos?- La interrumpí.

-Sí, morenos también

-¿Y altos? ¿Así como de 1,85?

-Claro

-Pues lo siento pero no encajo para nada en tu descripción

Volvió a reír divertida. Así que era el momento ideal para hacer un narrador de aquello que estaba pasando entre nosotros.

-¿Te das cuenta de lo bien que nos lo estamos pasando juntos pese a que sólo nos conocemos de 5 minutos? Imagínate lo genial que nos podemos llegar a caer si nos hacemos novios

 Y entonces, ella pronunció las palabras mágicas. Aquellas que parecen entremezclarse con música celestial cada vez que las escucho. Aquellas palabras que significan que algo precioso va a pasar en breve con sólo desearlo.

 

-Ya… Eso se lo dirás a todas

-Quizás- le dije yo evidenciando mi mirada de deseo –pero no todas tienen un culo tan irresistible como el tuyo- Eso fue suficiente para colmar el vaso. Sus neuronas cortocircuitaron y no pudo negar más la evidencia.

-¿Pero tú de dónde sales? ¿De dónde has salido?

 

Me cogió del brazo y en un instante me arrastró hasta la otra punta de la discoteca donde se encontraban sus alumnos y el resto de profesores. Una vez allí me los presentó uno a uno para acto seguido lanzarse a mi boca sin que yo pudiera mediar palabra. Como si fuera un trofeo que debía ser exhibido. Como comprenderéis, yo estaba bastante sorprendido ante el arrebato de fogosidad de mi amiga, así que en un despiste suyo aproveché para acercarme a una chica de su grupo y preguntarle si realmente era su profesora de inglés. «Sí, estamos alucinando, ¡el lunes tenemos clase con ella!».

 

¡Viva Inglaterra!

 

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Ligar con extranjeras: Las italianas del bar

Son las 3 de la tarde de un jueves prefallas.Los petardos se suceden cada vez con más frecuencia y las calles se empiezan a llenar de estátuas de cartón. En breve la ciudad se convertirá en una desproporcionada riada de turistas con ganas de mandanga. Estoy en un bar escribiendo para la web y a dos mesas de mí se han sentado tres chicas italianas. Ninguna de las tres se me antoja irresisitible, pero sí me pusiera a imaginar, podría, perfectamente, dejarme utilizar para sus fantasías de vacaciones-España-torero.

El caso es que van con maletas y llevan un mapa. Voy a acercarme y os cuento:

————————-

Pues ha sucedido lo siguiente:

-Hola ¿os puedo ayudar?

 Me han dicho que sí de forma muy abierta y sonriente. Estaban esperando que un amigo las recogiera. Se iban a quedar hasta el lunes en casa de un amigo cerca de mi casa. Una de ellas tenía unos ojos azules grandes y luminosos como rasgo más destacado. Otra llevaba una cola de caballo larga y bien sujeta, de ojos negros profundos y voz grave y la otra era castaña, con gafas y hablaba poco.

 -¿De donde sois?
-Milano– ha dicho la de la cola de caballo. Tal y como se ha estado dirigiendo a mí, me ha parecido  la más segura y confiada. Ha estado sonriendo de forma voluntaria para agradarme. La chica de gafas en cambio no abría la boca y al parecer era la que menos español entendía. La de los ojos azules intentaba aportar cosas pero se le veía demasiado incómoda con el idioma.

Nos hemos pedido unas cervezas porque les he dicho que en fallas se bebe cerveza. Tres italianas con cerveza suelen ser más divertidas que sin cerveza. Hemos dialogado sobre Italia. Al trabajar en un barco de cruceros como pianista conocí bastantes puertos del país. Les hacía críticas de forma divertida sobre sus costumbres y su forma de comunicarse y ellas reían. Sobre todo la interlocutora más participativa. Que si son incapaces de hablar a volumen normal, que si los italianos son unos pesados ligando, etc

Había que sexualizar la conversación cuanto antes para comprobar qué posibilidades había. El caso es que según ellas los españoles tenemos muy buena fama allí como seductores. Yo me he hecho el sorprendido, aunque más de una italiana me lo había dicho antes y después de dormir con ella. Hablando de ligar, seductores, Italia-España he querido sexualizar aun más la conversación:

-¿Qué clase de fantasía os habéis propuesto cumplir  en este viaje a Valencia?

Tras intentos, al final han entendido exactamente qué quería decirles con la pregunta. Y ha sido ahí donde las tres se han reído como locas. La chica de gafas ha puesto  muy roja y las dos más parlanchinas han contestado algo así como que son fantasías que no se podían contar a un desconocido.

-No soy tan desconocido. Llevamos una hora hablando, sabéis que vivo aquí arriba, que me dedico a la psicología y que me encantan las italianas. ¿Qué más queréis saber de mí para contarme vuestras fantasías?

Las miradas coquetas y de interrogación se han sucedido entre ellas entre sonrisas.. Entonces, como aconsejo a mis alumnos, he empezado yo por dar ejemplo y ponérselo fácil.

-Pues mi fantasía es conocer a unas chicas italianas, beberme unas cervezas con ellas, salir esta noche de fiesta y acabar enamorado de alguien o de “alguienes”.

Quizá fue el momento donde las carcajadas se han hecho más sonoras.

-Tú eres muy español- me ha dicho la chica de cola de caballo.

En  ese momento  ha entrado por la puerta Hugo. Un amigo del barrio de toda la vida.

-¡Hugo! –. Las tres chicas se levantan y acuden raudas al abrazo del nuevo personaje en la historia.

Al verme, Hugo sonríe maliciosamente.

-Sólo podías ser tú, Luis.

-¿Qué esperabas?

 Nos hemos reído con una complicidad intensa.

-Ya veo que habéis conocido al valenciano más golfo de Valencia nada más llegar.

-Sí. Luis es muy simpático.

-Soy simpático, Hugo. ¿Qué le vamos a hacer?

Hugo tras ayudarles con las maletas me ha lanzado una mirada buenrollera pero muy aclarativa: Que me olvide. Y así lo he hecho. Me he despedido de las tres deseándoles una feliz estancia en Valencia. Sin duda Hugo iba a por la de la cola de caballo.

Y yo os escribo con dos cervezas en el cuerpo. Sin italianas pero con una moraleja más en que contaros: A veces, las que están en tu barrio puede que lo estén por tu vecino.

Siempre vuestro, egoh.